Muchas mujeres embarazadas se preguntan cuándo deben dejar de conducir durante el embarazo o si, por el contrario, pueden conducir todo el tiempo.
La respuesta es que nunca hay que dejar de conducir durante el embarazo, pero siempre y cuando te sientas cómoda, alcances todo lo que necesites dentro del habitáculo y además puedas maniobrar con comodidad y con seguridad.
¿Cuándo debo dejar de conducir durante el embarazo?
El embarazo es un proceso que a cada mujer puede sentarle mejor o peor. Ciertas mujeres suelen sufrir mucho cansancio, por lo que lo más recomendable, si este es tu caso, es que no conduzcas. Al conducir debemos mantener todos los sentidos al máximo, y conducir durante el embarazo con cansancio digamos que no es una muy buena idea.
Otras mujeres se sienten incómodas sentadas en el coche, ya sea porque el cinturón de seguridad les aprieta en la parte baja de la barriga o por la posición que adopta su cuerpo debido a la ergonomía del asiento.
¿Es seguro conducir durante el embarazo?
La respuesta a esta pregunta es un claro sí, ya que estar embarazada no te impide hacer ciertas cosas como, por ejemplo, conducir. Por supuesto, siempre depende de la situación y del tipo de embarazo que tengas. No es lo mismo tener un embarazo de riesgo que uno tranquilo. Para la mayoría de mujeres embarazadas, seguir conduciendo no supone ningún peligro tanto para ellas como para el bebé. Si que hay que tener en cuenta ciertos detalles como, por ejemplo, en los viajes largos. Si a causa del embarazo estás más cansada de lo habitual, será mejor que dejes que conduzca otra persona. En los viajes largos, también es posible que tengas que parar para ir al baño más de lo habitual. Aprovecha estos parones para estirar las piernas y aliviar el dolor de espalda.
¿Debes llevar el cinturón de seguridad?
Por supuesto que sí, como cualquier otro usuario de la vía, el cinturón de seguridad es obligatorio. Ahora bien, tienes que tener en cuenta ciertas cosas a la hora de ponerte el cinturón de seguridad estando embarazada. La Dirección General de Tráfico recomienda atender a estas tres sencillas normas para tener en cuenta si te estás poniendo correctamente el cinturón de seguridad:
- Banda Inferior; deberá ir colocado por debajo del abdomen, ajustándola a la parte ósea de las caderas y sin apretar demasiado. Si te está haciendo daño, es que no lo estás ajustando bien. El cinturón debe quedar rígido, pero que sea cómodo para ti.
- Banda diagonal; posicionada entre los pechos, sobre el hombro y sin rozar el cuello. Piensa que cuando te ponías el cinturón sin estar embarazada, la banda cruzaba directamente tu abdomen. Ahora deberá rodearlo. De esta manera, en cualquier frenazo, el cinturón no ejercerá ninguna presión sobre el feto.
- Sin holguras; como hemos mencionado antes, las bandas del cinturón tienen que quedarse rígidas, sin ninguna holgura, pero tampoco tienen que suponerte ninguna molestia a la hora de conducir durante el embarazo.
Encontrarás mucha literatura sobre llevar o no el cinturón de seguridad cuando estás embarazo. No hace falta ser una eminencia para saber que el cinturón de seguridad salva vidas y sí, es cierto que siempre hay riesgo de lesión, pero el riesgo de lesión se reduce exponencialmente cuando se hace uso del cinturón de seguridad. Por eso, desde Bebé Seguro te pedimos y te aconsejamos que te pongas el cinturón.
Otros factores a tener en cuenta al conducir durante el embarazo
Al contrario que mucho de lo que está escrito en internet, no debes desactivar el airbag. Al igual que ocurre con el cinturón, es más peligroso no llevarlo que llevarlo. Con el airbag pasará lo mismo. Piensa con sentido común. Si tienes un accidente y no tienes airbag, sufrirás muchas más lesiones y más peligrosas si el airbag no funciona que estando activado.
En cuanto al asiento, deberás ir regulando la distancia entre tu vientre y el volante a medida que vaya avanzando el periodo de gestación. Los niveles de azúcar, sobre todo para las futuras mamás que sufran de diabetes gestacional, pueden jugarte una mala pasada, como, por ejemplo, los mareos. Aprende a reconocer cuando te está dando una bajada de azúcar y descansa con asiduidad durante la conducción.
Esperamos no habernos dejado nada. Y tú, ¿qué otras cosas sueles has tenido o tienes en cuenta a la hora de conducir durante el embarazo? Cuéntanoslo en los comentarios. Si te ha gustado este post y lo has visto útil, puedes puntuarlo arriba o dejarnos un comentario comentando qué te ha parecido.
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