Llevar a niños en el coche lleva una serie de regulaciones específicas que debemos seguir a raja tabla, no solo por cumplir con la normativa, también para que nuestros peques viajen de la forma más segura posible. Sin embargo, en ocasiones surgen dudas relacionadas con cómo colocar la silla. En este post del blog de Bebé Seguro te explicamos en detalle todo lo que hay que tener en cuenta para colocarla la sillita de bebé en el coche. ¡Sigue leyendo!
El peso y la estatura del niño, ¡lo más importante!
Según la normativa, la silla deberá ir en el sentido de la marcha o a contramarcha en función del peso de nuestro peque, que es el factor por el que se rige la normativa ECE R44/04. De acuerdo a esta normativa, hay que dividir por grupos de peso:
Grupo 0: de 0 a 10Kg
En las sillas del Grupo 0 el uso del cinturón es obligatorio y deberán ir posicionadas en el sentido de la marcha.
Grupo 0+: de 10 a 13Kg
La posición de estas sillas siempre deberá ser en sentido opuesto a la marcha del vehículo.
Grupo 1: de 9 a 18Kg
Este grupo de sillas pueden ir en tanto en el sentido de la marcha como a contramarcha. Siempre es recomendable posicionarlas a contramarcha, aunque algunos peques necesitan ver a sus padres para no ponerse nerviosos. Se recomienda utilizar siempre el cinturón de seguridad como medida adicional a la propia sillita, aunque su uso no es obligatorio.
Grupo 2: de 15 a 25Kg
Grupo 3: De 22 a 36Kg
Estos dos últimos grupos pueden ir en el sentido de la marcha y no es necesario que vayan a contramarcha, aunque sí que deberán utilizar siempre el cinturón de seguridad obligatoriamente.
Cómo puedes ver, el peso mínimo de algunos grupos comienza dentro del intervalo del grupo anterior. Esto se debe a que lo más recomendable es prolongar el máximo tiempo posible el uso de la silla, siempre y cuando no se sobrepasen los límites de cada grupo. Es decir, que si tu peque pesa 16 kilos y va en una silla del Grupo 1, lo más recomendable es no cambiar la silla hasta que pese 18Kg.
Está demostrado que posicionar la silla en el sentido contrario a la marcha del vehículo, reduce la probabilidad de sufrir lesiones en un alto porcentaje. Así lo arroja un informe de Race, que asegura que, a la hora de sufrir un impacto, las lesiones cervicales, de columna y cabeza son posibles, pero mucho menos probables. Y es que, colocando la silla en sentido contrario a la marcha, hace que, por ejemplo, el cuello no vaya hacia adelante si sufrimos un impacto, si no que amortigüe con el propio respaldo de la silla. Lo mismo ocurriría con la columna y con la cabeza. Además, la mayoría de impactos suelen ser entre dos coches que vienen de frente, yendo los dos a grandes velocidades. Sin embargo, si el golpe lo recibimos en la parte trasera del coche, es muy probable que sea a menos velocidad, ya que estos choques suelen producirse por despistes o circulando a velocidades bajas.
Esperamos haberte resuelto algunas dudas con este post. Si te ha gustado, puntúalo y déjanos tu comentario.
En Bebé Seguro puede reservar la sillita para tu bebé a través de este enlace. Además, seguro que te pueden interesar otros artículos que hemos escrito sobre este tema en nuestro blog, como son:
– ¿Qué indicaciones deben tener las sillas de bebe para coches homologadas?
– Recomendaciones para llevar a los peques en la sillita
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