Los primeros días del viaje
Los bebés sienten lo cambios de manera más intensa que nosotros. Por este motivo, si estamos constantemente de un lado para otro no les damos tiempo a adaptarse a las nuevas situaciones. Si tienes pensado irte de vacaciones, los pequeños, incluso los bebés, notarán que no están en su casa, en su cuna, con sus juguetes…, y puede que la escapada acabe convirtiéndose en una pesadilla. Por eso, desde Bebé Seguro hemos preparado estos pequeños consejos que te ayudarán a digerir mejor la nueva situación.
En primer lugar, cuando vayas a emprender un viaje con tu bebé, no olvides meter en su equipaje su mantita y su juguete favorito. De esta manera, aunque estés a miles de kilómetros de casa, siempre tendrá algo que le resulte familiar y le ayude a no sentirse tan extraño. Además, ten en cuenta que a los niños pequeños les cuesta mucho digerir cualquier tipo de modificación, por lo que también es aconsejable seguir la rutina del niño, sobre todo en lo referente a la hora de sus comidas, de sus siestas y el baño.
Al llegar la noche, es muy probable que, aunque esté acostumbrado a dormir solo, te reclame junto a el, se despierte a menudo, o que llore porque no reconocen la cama o la nueva habitación. Para calmarlo, es recomendable que permanezcas a su lado el tiempo necesario hasta que logres tranquilizarlo, incluso puedes acostarte junto a el hasta que se quede dormido. De esta manera, tu peque se sentirá mucho más seguro.
Siguiendo estos consejos conseguirás que tu viaje se convierta en una fabulosa experiencia junto a tu bebé, y así disfrutarás de unas relajadas y divertidas vacaciones en familia.
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